martes, 24 de junio de 2008

Examen, comprar componentes y "matar" a la vecina

Caí por fin en un sueño algo intranquilo, rendido ya, tras haber estado estudiando de hasta bien entrada la madrugada (yo también tengo mis momentos de estudio U_U) , desarrollando difíciles teoremas matemáticos (espero no me los pirateen), algunos circuitos avanzados muy complejos y cosas afines; al poco tiempo de haber empezado mi tan esperado y merecido descanso me despertó un ruido, "que podrá ser" dije, alguien andaba por el patio del edificio, tras reconocer una voz "fastidiosa molestosa", la señora(mi vecina) del departamento de abajo andaba rondando, amenazante, al menos para mi, se desplazaba de aquí para allá (lo supe por los ruidos poco notorios) y de rincón a rincón, costumbre que tienen los "habitantes" tan civilizados de esa parte del edificio. Activados nuevamente mis sentidos casi al momento cesaron los ruidos, de cierta manera me tranquilizó y traté de dormir, cuando en eso, la "señora" se dispuso otra vez a interrumpirme como si hubiera estado esperando pacientemente detrás de la puerta del patio; decidido a quedarme dormido como fuera, no tomé atención a cualquier cosa que pudiera molestar, seguro percibió esto y decidió entonces, la señora, utilizar el arma más contundente contra la paza y tan respetada tranquilidad edificio, revelando así, el interés tan grande por "joder" a cualquier habitante despierto (mala suerte era yo) del lugar, soltó a estos seres que en algunos llaman mascotas al campo: grandes, feroces, molestos, horripilantes, entrenados de la manera más específica para estropear tanto puertas como oídos ajenos, perros schnauzer dispuestos a todo para cumplir con sus órdenes, vuelta tras vuelta y con algún pequeño ladrido interrumpieron el poco silencio que quedaba, y así por media hora, después de esto cansada, creo yo, y con sueño por la hora, además comenzaba a llovisnar ya que recuerdo escuchar el ruido del techo, regresó a sus aposentos sin antes soltar una risa como la de los cuentos "muajaja muajaja volvereeeeee" y seguida por sus "pequeños molestosos" cerró la puerta, había llegado, finalmente, la hora del "japichu".
La mañana no podía comensar de mejor manera que con los acostumbrados diálogos entre la vecina y los otros inquilinos de ese departamento, "cállense" exclamé como se suele hacer cuando no quieres levantarte, "déjenme dormir", pareció no importarles y, la señora con su tan melodiosa y horrible voz que por más que se esfuerce la escucha todo mundo, continuó; minutos más tarde sonó el despertador y "juácatelas" de cabeza a la ducha porque el sueño me ganaba, ya se había calmado el ruido y supuse tendría un desayuno tranquilo, y así fue que comí, ordené mis cosas y me dispuse a salir del raudamente edificio con dirección a mi centro de estudios, y en la entrada fui sorprendido por un ataque planeado de la manera más sucia, los perros colocados en posiciones específicas esperando lanzar ladridos a diestra y siniestra a cuanto personaje distinguido saliera del edificio. Pasado el ataque acústico y todo un viaje de ida pensando en la manera más satisfactoria, vil, "picona", "matonezca", "johannística" de vengarme recuerdo también ese comercial del programa de radio "Mi Novela Favorita" cuando promocionan la obra "Crimen y Castigo" de Dostoievski y narran "con sus manos golpeó la cabeza de la vieja" xD!!! pero dejaría eso para después, llegué listo al examen, a enfrentar a mi profesor, discutir con él sobre el por qué de unas gráficas y otros temas, hacer simulaciones, utilizar aparatos "complejísimos", la tecnología de punta es algo que no se puede manejar así nada más y más lo relacionado con la electrónica (los que tienen alguna idea rianse de lo que digo y los que no, también háganlo por que no entendieron). Con el examen ya terminado y muchas otras cosas por hacer sguiría, entonces, con lo siguiente en mi recargada agenda, "a comprar componentes" para un circuito (cosas para la NASA con la que a veces me gusta colaborar). Reunido ya con otra gente nos dirigimos a este sitio tan peculiar, andamos un poco en busca de lo que se necesitaba, me detuve un momento a ver una AKM que vendía un señor en el suelo y después de ver el arsenal exhibido (tentado a comprar una de esas armas para con mucho cariño mostrársela a mi vecinita, si! no m había olvidado de ella!) continué apreciando el panorama, no presté mucha atención a los autos desmantelados ya que esos modelos no llamaban mi atención, consulté también el precio de celulares, artefactos y otras cosas que se pueden encontrar por ahí(aunque celulares es mejor en la "cachina" como bien me enseñara un viejo amigo mio experto en la compra y venta en ese sitio =D), habiendo sido atendidos de buena manera por una muy interesante vendedora y después en otro puesto por una sujeto como los de las películas con lentes oscuros, soldador en mano, pelos parados y cara casi quemada, era tiempo de regresar. Horas más tarde, después de un nutritivo almuerzo y terminadas mis clases, haber pedido a unos seres "mitades" firmar mi asistencia a una de estas, y quemado algunas cosas en el laboratorio de física, me encontraba pasando por la esquina acostumbrada. ya en la parte final del viaje a casa, a terminar el día; "¡un momento!" pensé, ah no! no se me habría de olvidar esta vez, tenía yo una venganza pendiente, al seguir caminando pensaba como podría realizar lo que sería mi propia versión de "fuente ovejuna", me visualizaba de distintas maneras: Entrar a mi casa, tomar la 9mm y disparar a los perros y a la "vieja" al más fiel estilo de un reconocido congresista ("tmr" viejo compra un arma pe nos ahorraríamos varios problemas); y, ¿por qué no?, ya que no había un arma de fuego en casa, tomar un martillo o mejor aún de la colección de cuchillos para cortar pescados alguno con bastante filo y esperar en mi ventana, si la puntería no me fallaba dormiría más tranquilo de ahora en adelante; escenario tras escenario, posibilidad tras posibilidad se fueron presentando en mi mente "cochambrosa". Una vez tomada la decisión y ya en mi casa, tomé lo que habría de usar como arma, me asomé por la ventana, "puxa no hay nadie" pensé al ver las luces apagadas, bajé de todas maneras con los ojos coléricos y una expresión de loco y malo en la cara, toqué la puerta una y otra vez pero ni los perros ladraron, nooo! se había escapado y no estabano ni los perros, bah! tendrá que volver y ahí estaré, no se me escapará, que no quede duda que algo haré =D.

No hay comentarios: